ANSIEDAD Y STRES

“Las cosas no son la diana.
Tu ser interior es el blanco, no muchas cosas,
sino un ser abierto a millones de cosas”

Osho

Para el año 2020
se prevé que la Depresión sea la causa más frecuente de malestar,
de enfermedad e incluso de muerte.
Hay que decir que en el 2007
la causa de muerte más habitual entre las mujeres
de edades entre los 30 y los 35 años,
fue el suicidio.

Los genetistas andan locos
buscando un supuesto gen que causa la ansiedad,
las fobias y la depresión.
¿No ven los telediarios?
¿Nunca han abierto un periódico?
¿Es que no levantan la vista del microscopio?

El Dr. Alexander
--basándose en los trabajos de Pavlov con sus famosos perros—
explica la Ansiedad como una perplejidad debida a señales contrarias,
una promesa de placer junto con una amenaza de dolor.

El experimento realizado consiste aproximadamente en lo siguiente:
Tenemos un animal enjaulado contra su voluntad, un perro para más señas,
y cada día, justo antes de darle la comida, hacemos sonar una campana.
Al cabo de los días el perro acaba asociando la campana a la comida,
es decir,
basta el sonido de la campana para que el perro empiece a salivar
y relamerse de gusto sin necesidad de haber visto aún comida alguna.

Conseguido esto,
que el perro crea que tras la campana le llegará la comida,
el siguiente paso consiste en hacerle ver que no podemos presuponer ningún futuro en base a las experiencias del pasado.
Así pues,
el juego consiste ahora en darle una descarga eléctrica,
en lugar de comida,
cada vez que suene la campanilla.

Claro,
al perro le tendrán con apetito y su primer impulso será acercarse
para comer,
pero enseguida recuerda que campana también puede ser igual a descarga.
Algo le tira hacia delante y algo le tira hacia atrás.
Como es normal el perro está indeciso, perplejo, en tensión, ansioso.
Y así pues.
Este señor deduce que si el perro se pone ansioso de esta manera las personas también.

Pues bien,
por mi parte yo prefiero morir a perder la vida,
que le tomen el pelo a su abuela.
Somos comparables, pero no extrapolables.

Un día me puse a tiro de una manguera de agua cuando de calor ni miau.
Yo hubiera preferido mantenerme seco,
pero todo fue por defender a un loro que tenían enjaulado
para divertirse cuando el personal del bar se aburría.

Me senté delante de la jaula y le dije a la dueña del local
–que se creía también la dueña del loro—
que si lanzaba agua contra el loro yo me quedaría donde estaba.
Me llevé un remojón y no en el mejor momento,
vale,
pero hice lo que mi Conciencia me dictó que hiciera
y me sentí como Dios.

La Ansiedad es la respuesta del Organismo
a situaciones que sentimos amenazantes o peligrosas.
El cerebro pone en alerta al cuerpo alterando, de entrada,
toda la cardio-respiración.
Ahora bien, cuando este ritmo antinatural persiste,
cuando estamos alterad@s un tercio o más de nuestros días,
cuando ese estado de alerta se ha cronificado,
entonces hay un alto riesgo de padecer trastornos cardiovasculares, digestivos, respiratorios, dermatológicos, psicológicos, sexuales y de todo.
Esta Ansiedad Cronificada es lo que entendemos por Estrés.

La Ansiedad es consecuencia del Instinto de Supervivencia
cuando nos vemos amenazados,
intranquilos o a disgusto,
entonces nos escapamos, atacamos o a ver qué hacemos.
Ahora bien,
cuando la Ansiedad se cronifica y podemos llamarlo Estrés,
o cuando sufrimos una Depresión,
además del Instinto de Supervivencia intervienen los Miedos.

La Ansiedad, incluso la crónica, no es una enfermedad,
es una reacción normal.
Tengamos en cuenta los entornos circundantes,
las circunstancias vitales que ha experimentado cada persona,
así como a la propia persona con su forma de ser particular,
y veremos que el trastorno no es la Ansiedad.

La Ansiedad es una respuesta del Mecanismo de Regulación Emocional
que busca la adaptación a lo que hay o, mejor dicho,
a lo que nosotros creemos que hay.
El verdadero trastorno es la vida que llevamos,
la vida que hacemos día a día muchas veces cotidiana, habitual, rutinaria,
vacía de sentido, aburrida o haciendo todo de corridas.

Un grado de Ansiedad preocupante puede ser
cuando interfiere en nuestra felicidad, cuando no te deja vivir,
cuando vives sin vivir en ti,
cuando habitualmente haces lo que no quieres haciéndolo de mala gana
y dejas de hacer lo que realmente quieres por temor
a lo que suceda después,
cuando quieres lo que no necesitas realmente,
cuando el miedo, la tristeza o la mala uva nos sacan de nuestras casillas,
cuando vamos con prisa a todas partes y siempre estamos ocupados,
cuando no respiramos en paz,
cuando no somos capaces de hacerlo ni 5 minutos diarios.

Hablar de soluciones es hablar de cambios en nuestra manera de pensar,
de entender y de vivir en la Vida, ésta Existencia que llevamos.
Sólo de ese modo actuaremos de otra manera,
nos tomaremos las cosas de otro modo y así podrá cambiar
la realidad de nuestro alrededor desde nuestro interior.

Luis dice que quiere hacer “puenting”.
Lanzarse será como soltarse, dejarse, aflojarse, abandonarse,
atreverse, confiarse, iniciarse,
sacudirse para después recomponerse.
En el último instante,
cuando parece que vamos a matarnos contra el suelo,
¡¡Zas!!,
subidón de adrenalina y,
si las gomas no fallan,
podremos sentir de nuevo y de pleno la Vida.

Todos necesitamos lugares y ambientes
donde reinen el respeto y la aceptación,
donde no haya comparaciones,
donde se respete la Libertad de cada cual,
donde haya participación, alegría y celebración.

Pues Todo está Siendo
Nada Es.

"El Vacío Cerebral.
Sientes pero no piensas.

¿Qué sientes?
Sientes nada, placer, no un placer normal.

Eres cosmos, eres todo y nada.
Te sientes dios y te sientes la nada"

Un Amigo Javier
recordando lo experimentado en el Desierto del Tasili.